El patrimonio
histórico-cultural
de Fortuna expone al
visitante el origen romano
de esta localidad, enmarcada
en la Comarca Oriental. Muestra de este importante pasado
histórico se puede encontrar el Balneario, a 3 kilómetros de la villa, que remonta su actividad termal a la época romana, conocido y utilizado también por los árabes. Sus aguas surgen a 53 ºC, y son ideales para los tratamientos de enfermedades reumáticas y respiratorias, lo que junto a la calidad de sus instalaciones hacen de esta estación termal uno de los balnearios más preciados.
Junto al Balneario de Fortuna se encuentra la Cueva Negra, un abrigo natural de grandes dimensiones, en el que existe un manantial de aguas medicinales, que en la antigüedad dio origen a un templo romano dedicado a las Ninfas.
Entre los monumentos urbanos más importantes también encontramos la Iglesia Parroquial de la Purísima, del siglo XVIII, en la que destaca en el Retablo del Altar Mayor, la imagen de La Dolorosa, de la Escuela de Salzillo, y la Custodia de las Espigas de Zayadatti; la Casa Convento, de estilo modernista; y la Casa Consistorial, restaurada en 1989, que conserva en el vestíbulo de entrada un variado y rico conjunto de elementos decorativos de estilo modernista.