Clase: Sedimentaria evaporítica carbonatada
Descripción
Roca compuesta por calcita, dolomita e hidróxidos de hierro, que posee una estructura vacuolar y más o menos porosa, con huecos relativamente angulares. De color pardo, amarillento, rojizo o más raramente grisáceo. Suele carecer de estratificación y de restos fósiles.
Por su estructura solo se la puede confundir con algunos travertinos, aunque el contexto genético y la angulosidad de sus huecos la distinguen del mismo.
Ambiente de formación
Las carniolas se originan en las proximidades de la orilla de lagunas salobres y de otras masas de aguas salinas con circulación muy restringida y sometidas a un clima árido y cálido. Se origina por la precipitación de caliza y dolomía sobre yeso o anhidrita, que posteriormente se disuelven dejando huecos más o menos angulosos.
Localidades
Es una roca poco común en la región y origina afloramientos de poca extensión y potencia. En numerosas ocasiones solo aparecen bloques o fragmentos de las mismas dispersos en sedimentos evaporíticos del Triásico superior (facies Keuper). Más raramente, aunque originando afloramientos más importantes, aparece asociada a materiales de principios del Jurásico y Cretácico.
Se localizan buenos ejemplares de carniolas en el Triásico de Abanilla, especialmente cerca del nacimiento del río Chícamo, y en el triángulo Caravaca de la Cruz -Calasparra- Bullas. En Yecla, se encuentran en el Cretácico inferior del Prebético externo.
Usos
La carniola es una roca carente de interés comercial o industrial. Muy localmente se ha utilizado como piedra de mampostería para la estabilización de terrazas agrícolas y la construcción de paredes en viviendas rurales, junto con otras rocas.
Antonio del Ramo
Francisco Guillén