Alejandro Valverde Belmonte nació en Las Lumbreras de Monteagudo, Murcia, un 25 de abril de 1980.
De entre todos los deportes escogió el ciclismo. El deporte en el que la épica y las grandes gestas sólo están al alcance de aquellos que pasan a formar parte de su libro de oro. Ahora ese libro se ha vuelto a abrir para añadir una nueva página; la que Valverde está escribiendo.
Alejandro Valverde forma parte de la generación del 80, ésa que en el Mundial de ciclismo en Madrid en 2005 acaparó todos los cajones del podium, confirmando que a sus 25 años ya no eran jóvenes promesas de futuro sino esperanzadoras realidades de presente.
Sus inicios
Pero para conocer cómo este murciano se inició en el ciclismo hay que remontarse casi veinte años atras. "Mi padre me compró una bicicleta cuando tenía nueve años y la primera vez que salí hice 100 kilómetros", explica. Desde ese momento, ya nunca se separaría de la bicicleta "Empecé corriendo como hobby. Primero estuve en la escuela de ciclismo de Murcia y después pasé al J. Ramos y allí corrí en cadetes y juveniles", recuerda.
Los triunfos en esa época no se hicieron esperar "Gané la segunda carrera que disputé, por eso no tuve muchas dudas sobre si valía o no para el ciclismo". En realidad, no sólo ganó la segunda carrera, lo gano todo. Cuentan los que recuerdan verle correr en sus inicios que los padres del resto de niños le pedían, casi le suplicaban, que no participara en todas las carreras con el fin de que alguno de los demás ciclistas tuviese la oportunidad de ganar, al menos , una vez. Esta circunstancia fue la que le hizo ganarse el apodo de "El imbatido", que ahora, años después, han vuelto a rescatar los medios de comunicación.
Tras sus paso por el J. Ramos, Valverde se fue al equipo Banesto para disputar su primera temporada como amateur y de allí saltó a las filas de Kelme. El murciano no pudo resistirse a la oferta que le hizo el equipo alicantino, que le propuso estar dos años más en amateur y pasar a profesional en 2002. Todo aquello por lo que siempre había luchado lo tenía ahora al alcance de la mano con sólo 22 años.
Alejandro y el ciclismo profesional
En el tiempo que lleva como ciclista profesional se ha hecho un hueco entre los mejores y siempre es un firme candidato a la victoria en muchas de las pruebas que disputa. "Muchas veces te sientes presionado por la prensa, pero teniendo los pies en el suelo e intentado hacerlo lo mejor posible creo que voy bien", asegura.
Sus siete triunfos al principio de la temporada 2005 le convirtieron, junto a Freire, en el corredor español más laureado en ese momento, contribuyendo, de esta manera, a hacer cierta la frase 'el ciclismo es un deporte en el que atacan todos y gana Valverde', pero él no termina de tomársela muy en serio. "La gente dice que parece que gano fácil y se piensa que puedo ganarlo todo, pero la verdad es que es muy difícil ganar, tienen que acompañarte una serie de circunstancias como la suerte, las fuerzas y sobre todo la mentalidad", comenta. Todas estas circunstancias se han aliado con él y parecen decididas a no abandonarle nunca.
El año 2004 firmó contrato con el equipo Illes Balears, que luego pasaría a llamarse Caisse d'Epargne-Illes Balears. Desde entonces no ha parado de acumular triunfos parciales de etapa en grandes vueltas, como en el Tour de Francia en 2005 y 2008, o en la Vuelta a España en 2003, 2004, 2006, y 2008, además de haber conseguido ser líder en varias etapas en ambas competiciones, y haber terminado varias veces en el podio final en la ronda española.
En los últimos años se ha consolidado en la clásicas y carreras de un día, y en las vueltas por etapas de corta duración. Acumula triunfos en la Lieja-Bastoña-Lieja, Flecha Valona, París-Camembert, Clásica de San Sebastián, Volta a Catalunya, Dauphiné Libéré, Vuelta a la Comunidad Valenciana, Vuelta a Murcia, Challenge de Mallorca, Campeonatos de España en ruta, y victorias de etapa y podios en las principales carreras del calendario internacional, como Campeonatos del Mundo en ruta, París-Niza, Criterium Internacional, Tour de Romandía, o Vuelta al País Vasco.
2009, el año del cambio
Sin duda, 2009 ha sido su mejor año como ciclista. La victoria en la clasificación general de la Vuelta a España así lo atestigua y refrenda un cambio en su forma de correr, y ese salto de calidad que le faltaba en su palmarés. Ya no es el corredor explosivo e impulsivo de sus primeros años. Ahora regula más sus fuerzas, está más atento en carrera, y, sobre todo, ha mejorado sus prestaciones contra el crono. Sus triunfos en la general de Dauphiné Libéré, Volta a Catalunya y Vuelta a Burgos y alguna victoria de etapa completan su bagaje en 2009. Todo ello a pesar de su suspensión por el Comité Olímpico Italiano (CONI), que le impide competir en el país transalpino durante dos años y le impidió competir en el Tour de Francia.
2012: regreso triunfal
Comenzó la temporada el 17 de enero en el Tour Down Under. Participó en la Vuelta a Andalucía donde logró ganar una etapa y la clasificación general, se adjudicó la 3ª etapa en la París-Niza y subió al podio como tercer clasificado de la carrera, lo que supuso un comienzo de temporada espectacular tras más de año y medio fuera del ciclismo profesional. Disputó la prueba en ruta de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Igualmente participa en la Vuelta a España, donde destaca de un modo brillante, consiguiendo alzarse con la segunda posición en la clasificación general. Al final de su exitosa campaña, fue galardonado con el Premio AS del deporte.
Desde su regreso hasta hoy Alejandro sólo ha cosechado éxitos como el de Campeón del Mundo, sucedió el 30 de septiembre de 2018. Se proclamó campeón del Mundo con 38 años sucediendo al tricampeón eslovaco Peter Sagan y convirtiéndose en el cuarto español en ganar un Mundial en la modalidad de ruta tras Abraham Olano, Igor Astarloa y Óscar Freire. Valverde obtuvo su 7ª medalla (récord total) y su primera de oro.