Biografía
![Convento de La Merced [Lorca_Carlos Mellado]](/servlet/integra.servlets.Imagenes?METHOD=VERIMAGEN_51764&nombre=Lorca_Carlos_Mellado_Convento_de_La_Merced_res_720.jpg)
Lorca Taller del Tiempo
Carlos Mellado Pérez de Meca, Madrid 1876 - Chuecos (Murcia) 1934
Una infancia vivida entre Madrid y Lorca
Carlos Mellado nació el día 4 de abril de 1876 en Madrid. Sus padres fueron Julio Mellado Pérez de Meca y Joaquina Pérez de Meca y Trossé, ambos naturales de Lorca, aunque vivían en la capital de España al menos desde 1874. Pasaban los inviernos en Madrid para disfrutar luego del verano lorquino.
Carlos fue el mayor de cuatro hermanos, y estudió la Licenciatura de Derecho en la Universidad Central de Madrid. Nunca ejercería esta profesión, sus intereses irían por otro lado. No obstante perteneció al Ilustre Colegio de Abogados de Lorca desde el 8 de octubre de 1905.
En 6 años escribe su poesía
Entre 1907 y 1913 escribe la mayor parte de su obra literaria.
En 1914 moriría el padre del poeta, sería un duro golpe para Carlos Mellado. Un año más tarde escribiría Está en el cielo, donde se hace eco de los recuerdos que tenían sus hijos de su abuelo, Julio Mellado.
Se casó con Francisca Mellado Terrer. Con ella tendría cuatro hijos: Luis, Enrique, Rafael y Gonzalo. Su esposa desprendía dulzura y armonía para la familia, incluso escribía en un gracioso diario las travesuras que día a día iban dejando en sus vidas los hijos que había tenido con el poeta. Pero Francisca murió en 1921. Fue a partir de esta fecha cuando Carlos Mellado volvió a coger la pluma y a continuar su labor literaria.
Su segundo matrimonio y los últimos años de su vida en Chuecos
Pasaba grandes temporadas en Madrid, y tras la muerte de su madre en 1931 Carlos Mellado contrae de nuevo matrimonio con Pilar Álvarez Nouviles, mujer de carácter independiente y fuerte personalidad.
A partir de este segundo matrimonio vuelve a Chuecos, donde era dueño de una tierra heredada de sus padres. Allí abandonó la poesía.
En 1932 es operado de la vesícula biliar en el Sanatorio del Rosario de Madrid. Dos años más tarde, tras volver a Chuecos, moriría de tuberculosis pulmonar, la enfermedad romántica.