Los rastros de un pasado prehistórico
Las condiciones del municipio de Fuente Álamo, situado en el punto donde coinciden los términos de Murcia, Cartagena y Lorca, han provocado los asentamientos de diversos pueblos de la Península en época prehistórica. El entorno del paraje fuentealamero resultó propicio para el establecimiento de pueblos primitivos. A la benignidad del clima se le sumaba la calidad de un suelo fértil, rodeado por abundantes yacimientos de agua.
La evidencia arqueológica no es demasiado abundante, pero puede afirmarse que el hombre prehistórico anduvo por estas tierras, como lo prueban los hallazgos en las cuevas de la Sierra del Algarrobo, que datan de tiempos paleolíticos. También constan ciertos rasgos de la presencia de la cultura argárica en los restos de los yacimientos de la Sierra de Carrascoy. Puede decirse que la situación estratégica de Fuente Álamo no ha pasado desapercibida por los pobladores de estas tierras. Han sabido aprovechar una posición que les lleva a encontrarse muy próximos a los principales núcleos poblacionales de la actual Región de Murcia, así como de las montañas y el Mar Mediterráneo. También el pueblo íbero haría su aparición en esta zona, evidenciado en el sepulcro megalítico descubierto en sus inmediaciones. Este hallazgo testimonia la llegada de antiguos pobladores, posiblemente costetanos u otras tribus íberas.