Emilio Sáez Sánchez. Caravaca de la Cruz (Murcia), 1917- Tordesillas (Valladolid), 1988.
Desde la infancia
Emilio Sáez Sánchez nació el 5 de diciembre de 1917 en la ciudad de Caravaca de la Cruz. Hijo del procurador Emilio Sáez López y Encarnación Sánchez Caparrós, desde muy pequeño recibió clases en su casa.
Siendo aun niño, su profesor, D. Alfonso Moza, pudo ver como Emilio era un apasionado de los libros y la lectura. Era el único niño que conocía que siempre tenía entre sus manos un libro, o un TBO, demostrando así, no tener manías respecto a sus preferencias por la literatura.
Su ensimismamiento hacia la lectura era de tal magnitud, que incluso su padre se veía obligado a sacarlo de casa para que jugase con sus compañeros, pues siempre estaba leyendo.
Esta afición por la lectura la había heredado de su padre, quien fue corresponsal de ABC y lector empedernido.
Los años de la Guerra y la posguerra
Tras haber cursado sus estudios de Bachiller en el colegio Cervantes de Caravaca, Emilio Sáez se matriculó en 1933 en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Murcia.
Pero el estallido de la Guerra Civil forzó un paréntesis en su carrera, ya que fue llevado al frente de Barbastro, en Huesca, desde donde pasó a Francia. Allí se convirtió en prisionero en un campo de concentración, situación que se repetiría en España, pues estuvo en otro campo en Zaragoza. Gracias a la actuación de su padre puso ser liberado y continuó sus estudios universitarios en Madrid.
En 1940, tras licenciarse en la especialidad de Historia Medieval, impartió clases de Geografía e Historia en la 'Academia Torres', situación que compaginaba con su papel de profesor ayudante en la Universidad de Madrid. Fue precisamente en esta academia madrileña donde coincidió con un antigua compañera de estudios, Amalia Sánchez López, con quien acabaría casándose a la postre, en 1950 y teniendo cuatro hijos.
El recuerdo al catedrático
En 1958 Emilio Sáez obtuvo la cátedra de Historia Medieval de España en la Universidad de Barcelona, puesto en el que permaneció hasta 1979, año en el que solicitó su traslado a la Universidad Complutense de Madrid. En la capital de España se jubilaría en 1986 a la edad de 68 años.
Con anterioridad a este hecho, Emilio Sáez fue nombrado miembro de la Real Academia Alfonso X el Sabio de Murcia en 1973, en reconocimiento a su labor como historiador e investigador.
La fatalidad quiso que el 7 de mayo de 1988, Emilio Sáez falleciese en un trágico accidente automovilístico en Tordesillas, cuando regresaba de pronunciar la conferencia de clausura de un Congreso de Estudios Medievales.
A pesar de ello, el recuerdo a su persona y a su trabajo como profesor, historiador, investigador y creador de instituciones y publicaciones, sigue vivo en su ciudad natal, a la cual tenía siempre presente.
Como prueba de reconocimiento se decidió conceder el nombre del profesor Emilio Sáez a la Casa de la Cultura en la Ciudad de Caravaca en 1994.