Luis Manzanares fue un pachequero universal y genuino, un amante incondicional de su tierra natal a la que ensalzó y glosó en todas sus obras.
Mantuvo una nutrida actividad intelectual como Catedrático de la Escuela Superior de Comercio de Madrid y colaboró en importantes publicaciones de la época, granjeándose la admiración y amistad de figuras de la talla de Antonio Machado, de quien fue ayudante de Cátedra en Segovia.
Luis Manzanares fue toda su vida un maestro de vocación, labor que tuvo que compaginar con su ascenso en la escala profesional, y con la consecución de los títulos de Doctor en Derecho y en Historia, culminando su escalada como Director de la Escuela de Comercio de Madrid.
Consagró Luis Manzanares su vida a la cultura, a la actividad intelectual, a la instrucción en las artes y las letras, realizando numerosas obras para uso de los estudiantes y escribiendo multitud de artículos de prensa.
Destaca su colección bibliográfica sobre Torre Pacheco, en la que han quedado plasmados los eventos, vivencias, colores y ambientes de este pueblo, Patria Chica de Luis Manzanares.