Sapo Partero Común macho, portando huevos
Sapo Partero Común macho, portando huevos
Vicente HERNANDEZ GIL

     El Sapo Partero es un anfibio de tamaño pequeño, mide unos 4 cm. Su aspecto es rechoncho, con la cabeza grande y el hocico redondeado. Los ojos son prominentes, y la pupila vertical, con el iris plateado o dorado. El tímpano es bien visible y más pequeño que el ojo.

     La piel tiene aspecto granuloso, por estar salpicada de pequeñas verrugas, entre las que destacan dos hileras que recorren el cuerpo desde las parótidas hasta las ingles. Las patas son cortas y fuertes. Las posteriores, con una membrana interdigital reducida a la base de los dedos, presentan un tubérculo, como un callo, mientras que las anteriores poseen tres. La coloración general es gris u olivácea con manchas verdes, rojas y negras, pequeñas.

Costumbres

     Es una especie principalmente terrestre y nocturna. Pasa el día oculto, semienterrado, o en pequeñas cuevas que él mismo excava con sus patas anteriores. Al contrario que el resto de anfibios murcianos, la puesta tiene lugar en tierra. En ocasiones un mismo macho puede aparearse con más de una hembra, llegando a transportar hasta tres puestas.

     Una vez son depositados por la hembra, el macho los recoge entrelazándolos en sus patas posteriores y los fecunda. Después se separan y el macho queda al cuidado de los huevos, saliendo cada noche a remojarlos para impedir su desecación. Cuando el renacuajo está perfectamente formado, aprovecha uno de sus baños nocturnos para abandonar a su progenitor e iniciar su vida libre en el agua. Permanece desde cuatro meses a todo el año en el agua.

Hábitat y distribución

     Se encuentra en una gran variedad de ecosistemas, habiendo sido encontrado en pinares, encinares, cultivos, ramblas, siempre con puntos de agua cercanos: arroyos, balsas, fuentes, etc. Alcanza los 1.500 metros de altitud en el Noroeste. La distribución geográfica mundial de esta especie abarca un amplio territorio de Europa Occidental: casi toda la Península Ibérica, casi toda Francia, sur de Bélgica, norte de Suiza y oeste de Alemania. También existen poblaciones aisladas en zonas altas del norte de Marruecos.

     En España se localiza en toda la mitad septentrional de la Península Ibérica, llegando por el oeste hasta las sierras del sur de la provincia de Alicante. La falta de estudios específicos hace que se desconozca la distribución real del Sapo Partero en Murcia, aunque las poblaciones del norte de la región se han atribuido a ella, diferenciándolas de las del Noroeste, y la más aislada de Sierra Espuña, que pertenecerían al Sapo Partero Bético (Alytes dickhilleni).

Protección y conservación

     Con carácter general está afectando a la especie la desaparición de puntos de agua, así como los modos tradicionales de usos de la misma: albercas, abrevaderos, tornajos, pequeñas balsas...; la pérdida de calidad de las aguas, su contaminación, la introducción de especies alóctonas (cangrejos, peces, etc.) y un desarrollo larvario prolongado en el tiempo, exige puntos de agua estables también en el tiempo para finalizarlo. En las regiones limítrofes de Almería y Alicante se están llevando a cabo sencillas acciones que permiten augurar la conservación de éste y otros anfibios, mediante la restauración y acondicioamiento de fuentes, abrevaderos, balsas... y la creación de otras, nuevas.

Vicente Hernández Gil