La Feria y Fiestas en honor a San Cosme y San Damián se celebran en Abarán durante la última semana de Septiembre, gozando de gran popularidad y fuerte raigambre entre los abaraneros.
La veneración a los Santos Médicos en Abarán se remonta a principios del siglo XVI, mientras que las fiestas en su honor se instauraron en 1596.
Estas Fiestas se inician con la Procesión de los Santos Médicos, desde su Ermita hasta la Iglesia Parroquial, constituyendo una tradición sostenida por siglos de devoción.
Entre los actos más representativos y celebrados dentro de la programación, se encuentran la Monumental Corrida de Toros, el Certamen de Zarzuela Villa de Abarán y la Batalla de las Flores.
Celebración: segunda quincena de septiembre
Los Santos Médicos, Patronos de Abarán
La historia de las profesiones médicas: medicina, cirugía y farmacia, relata como, tanto dentro como fuera de las fronteras españolas, han existido congregaciones, colegios o gremios colocados bajo la protección de los Santos Cosme y Damián.
Así, en ciudades como Tudela, Tarragona, Teruel y Calatayud, se tiene noticia de la existencia de congregaciones religioso-profesionales de médicos, farmacéuticos y cirujanos, creadas bajo la denominación de Cofradías y Colegios de San Cosme y San Damián.
La elección de estos santos patronos por médicos, farmacéuticos y cirujanos, se debe a que dedicaron toda su vida a la investigación de enfermedades y remedios para curarlas, valiéndose de su fe en Dios y de los conocimientos científicos que poseían.
San Cosme y San Damián vivieron entre los siglos III y IV d. C., contándose entre los santos más famosos de la antigüedad por su capacidad para obtener curas milagrosas. Su popularidad para remediar los males de la salud, se encuentra plasmada en pinturas de artistas de renombre, que los representan al pie de la cama del enfermo protegiéndole
Una de estas pinturas del siglo XVIII se encuentra en el Museo de la Farmacia Hispana, en la Facultad de Farmacia de Madrid. En este mismo museo aparece otro cuadro con los Santos Médicos a los pies de la Virgen del Amparo, reflejando la ayuda que ésta les prestaba en la curación del enfermo.
Según el 'martirologio romano', en Egea, ciudad de Arabia, los santos hermanos gemelos Cosme y Damián, sufrieron diversos tormentos en las persecuciones de Diocleciano. Fueron cargados de cadenas, arrojados a la cárcel, pasados por el agua y el fuego, crucificados, asaetados y decapitados.
Abarán tiene la suerte de contar con la protección de estos Santos, bajo cuyo patronazgo también se encuentran otros lugares de España.
Orígenes de las Fiestas Patronales de San Cosme y San Damián en Abarán
La devoción abaranera hacia los Santos Cosme y Damián tiene una antigüedad de más de cuatrocientos años, por lo que su origen se remonta a la época de conversión de los pobladores musulmanes al cristianismo.
Se tiene constancia de que por el año 1505, fecha en que Fernando el Católico ordena la conversión de las mezquitas del Valle de Ricote en iglesias, ya se veneraban a los Santos Médicos.
Son numerosas las historias de sus milagros, que han transcendido hasta nuestros días mediante la tradición oral. Es el caso del cólera morbo que asolaba la población y que se cortó por la intercesión de los Santos, o la gripe que, según decían, había traído una Banda de Música Militar de Cartagena que recorrió las calles de Abarán durante unas fiestas populares.
En más de cuatro siglos, hechos como la expulsión de los moriscos en 1613, que dejó despoblado Abarán, o las diversas enfermedades que azotaron la zona, pudieron ser el origen de que el pueblo mirase hacia los Santos Médicos, no solo como curanderos de almas, sino también de cuerpos.
Este periódico transcurrir de las enfermedades llevaría a entronizarlos como patronos de la villa, en sustitución de San Martín.
Nadie, entre las generaciones más recientes, había oído hablar del origen de la devoción a San Cosme y San Damián, hasta que vieron la luz las mandas testamentarias de Leonor Molina. Según estos documentos históricos, el 26 de noviembre de 1596 Leonor Molina, viuda del sacristán Cosme de Juan Durán, alcalde de Abarán, dejó instaurada la fiesta de San Cosme y San Damián.
Últimos tiempos
Las Fiestas Patronales de San Cosme y San Damián tuvieron un gran impulso en los últimos años del siglo XIX. Las construcciones del primer teatro y de la plaza de toros, la llegada de la luz eléctrica y la sensibilidad que mostraba el Ayuntamiento por la urbanización de las calles, crearon un nuevo marco para las tradicionales celebraciones conmemorativas.
Las Fiestas en estos años, aparte de los toros y el teatro, los platos fuertes, tenían un componente religioso de gran peso. El Traslado de los Santos desde su Ermita hasta la Iglesia Parroquial, la misa solemne cantada con orquesta el día 27 para la que se traía a un elocuente predicador que hacía el panegírico de San Cosme y San Damián, la procesión por los alrededores de la parroquia, y el regreso de los Santos Médicos a su ermita el día 29, convocaban a casi todos los vecinos de la población. También tenían su importancia los dos castillos de fuegos artificiales que se disparaban los días 26 y 27 en la ermita.
Año tras año se han ido añadiendo más y más festejos hasta la profusión de nuestros días. Los carteles, la romería a la Sierra del Oro, la batalla de las flores, la elección de la reina, las verbenas municipales, los certámenes de bandas y zarzuela, los festejos deportivos y algunos otros se han incorporado durante los últimos cien años.
![Romería de las Fiestas [Abarán_Fiestas Patronales]](/servlet/integra.servlets.Imagenes?METHOD=VERIMAGEN_31612&nombre=Abaran_Fiestas_PatronalesRomeria_de_las_Fiestas_res_720.jpg)
