Fotografía Estenopeica

Cogemos dos latas de refresco.

Aprovechamos la tapa de una lata y de la otra el cuerpo, y tiramos los sobrantes a la basura.

El paso anterior lo haremos con un abrelatas.

Lijamos el borde superior de la lata.

Lijamos el borde interior de la lata.

Con una aguja del número 12, hacemos una incisión, que será el objetivo (estenopo). Lo haremos en medio de la lata.

Lijaremos bien esa parte.

Con un rotulador permanente realizaremos un círculo a modo de mirilla para localizar el agujero realizado (estenopo).

Con pintura negra mate pintamos la lata por dentro.

No hace falta poner demasiado, solo cubrir todo el interior de negro.

Con cinta aislante negra forramos la tapa de nuestra cámara (por las dos caras), esto es para evitar reflejos.

La tapa debe encajar a la perfección en la lata. ¡¡Ojo con poner demasiada cinta!!.

Quitaremos los sobrantes con unas tijeras o cútex.

Cubrimos la incisión (estenopo) realizada anteriormente con cinta negra, pero doblándole los extremos para facilitar su apertura y cierre a la hora de hacer la fotografía.

Se recomienda que esta tira esté hecha con varias tiras superpuestas.

Ahora es el momento de meter el papel fotográfico dentro de la cámara. Debe realizarse en un lugar oscuro. Manipular por los bordes para no dejar huellas.

El papel no debe tapar el estenopo realizado con la aguja.

Cerramos la cámara con cinta aislante. Antes de salir a la luz deberíamos revisar que está todo bien sellado y la cinta que cubre el estenopo en su sitio.

Ya tenemos nuestra cámara de fotos. Para echar una foto, colocamos la cámara fija en un sitio, levantamos la cinta del estenopo y cerramos en unos segundos.

Si hay mucha luz unos 15 o 20 sgs., si por el contrario está nublado dejaremos abierto de 30 a 40 sgs. La imagen la tendremos en negativo, escaneamos y listo.

Puedes colocar la cámara en un trípode ayudándote de un imán o cinta adhesiva.