Parada 1. Aula de la Naturaleza
El Aula de la Naturaleza del Rellano es una antigua escuela unitaria de esta pedanía molinense, rehabilitada y enclavada en una zona de gran interés paisajístico, geológico, botánico y faunístico. Constituye el centro de partida de diversas actividades educativas y culturales realizadas por el Ayuntamiento de Molina de Segura. Así como un punto clave en diversos cursos y seminarios sobre temas geológicos organizados por diferentes organismos, ya que consta de una exposición permanente sobre la geología del municipio de Molina de Segura, que sirve para conocer la evolución de la cuenca de Fortuna, lo que le convierte en un aula pionera en la divulgación de la geología en la Región.
La exposición “Molina: Más de 200 Millones de Años de la Historia de la Tierra” se estructura en tres módulos: el primero (vitrinas 1 y 10) trata de introducir brevemente al visitante en el medio geológico; mostrando imágenes, maquetas y muestras de mano, de estructuras geológicas (estratos, grietas de retracción, ripples, pliegues, discordancias, fallas, etc.). Así mismo, se intenta dar una idea muy sencilla del origen de los fósiles, de los distintos tipos de fosilización y de los principales grupos taxonómicos existentes en el municipio, mediante ejemplares de fósiles y junto a ellos ejemplares de organismos actuales parecidos.
El segundo módulo y principal (vitrinas 2 a 9), se centra en la evolución paleogeográfica, paleoclimática y paleobiológica del entorno próximo del municipio, desde principios del Mesozoico (Triásico) hasta la actualidad, para ello se intenta mostrar la historia geológica de la zona mediante: fotografías comentadas, minerales, sedimentos, rocas, fósiles y maquetas tridimensionales de escayola a escala 1: 33.000, con la paleogeografía de la localidad durante los últimos 10 millones de años. Dedicándose un apartado (vitrina 9) a la geología y la interpretación del relieve y modelado actuales (relieve en cuestas, crestas, cárcavas, glacis, abanicos aluviales, meandros, etc.).
Finalmente resaltar la existencia de una reproducción del fragmento de meteorito más grande localizado en España. El meteorito cayó en la madrugada del 24 de diciembre de 1858 en la zona occidental del municipio (Campotéjar-La Hornera) y por efectos de la colisión se fragmentó en numerosos trozos, de los cuales fueron recogidos unos 16. El mayor de estos fragmentos, aquí reproducido, posee un peso de unos 116 kg y se clasifica como un condrito brechoide rico en olivino e hiperstena, que actualmente se conserva en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid, junto con otros tres fragmentos del mismo.
Para consultar el horario de visita se deben poner en contacto con la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Molina de Segura:
Tel.: 968 386216
Fax: 968 643657.
E-mail: medioambiente@molinadesegura.es
www:molinadesegura.es
Parada 2. Arrecifes coralinos del Rellano
Los arrecifes del Rellano constituyen un excepcional complejo arrecifal de unas cinco bioconstrucciones coralinas de hace unos 8-7 millones de años, que se desarrollaron sobre las zonas marginales de un antiguo abanico deltaico, que ocupaba las proximidades de la Sierra de Lugar, que en esa época constituía una isla. El ascenso del nivel del mar en esta época generó que los arrecifes se fuesen desplazando hacia noroeste (hacia tierra firme), por lo que los que están situados más al norte y a cotas más altas son los más modernos.
El más antiguo está situado en las proximidades del cauce de la rambla del Chorrillo a la altura del Rellano y se instaló sobre el canal de un antiguo abanico deltaico.
El segundo arrecife se localiza a la salida del Rellano en dirección a la Estación de Blanca, a la izquierda de la carretera culminando el cerro del Apóstol (Alto del Rellano), situándose sobre una barra arenoso-conglomerática del frente del delta. Este arrecife conserva íntegramente su morfología.
El tercer arrecife, se localiza a la izquierda de la carretera, que lo corta mostrando una estructura interna formada por colonias ramificadas y globulares de corales del género Tarbellastraea, que hacia el sur son sustituidas por corales del género Porites. Entre estas colonias se pueden localizar otros corales meandroides, restos de algas rojas y moluscos marinos (Chlamys sp., Conus sp., etc.). El arrecife ha sido afectado por la tectónica estando más o menos fracturado y afectado por fallas de salto en dirección. Este talud de la carretera es uno de los mejores ejemplos de la estructura interna del núcleo de un arrecife mioceno según el Dr. Carlos Santisteban de la Universidad de Valencia, quien los describe minuciosamente en su tesis doctoral y en otras publicaciones científicas.
El cuarto arrecife se localiza ladera arriba del anterior en la mitad de la ladera. En superficie está karstificado y resulta relativamente difícil su observación.
El quinto arrecife culmina el cerro. En él se pueden observar numerosas colonias globosas de Tarbellastraea sp., aunque estas están muy karstificadas y no siempre es posible observar los políperos.
La existencia de estos arrecifes nos informa que hace unos 8-7 millones de años (durante el Tortoniense superior) el paraje del Rellano era un medio marino somero, cercano a algunas islas (sierra de Lugar) y al continente emergido (sierras del Águila, la Pila, etc.). Este mar, en la zona de los arrecifes, tendría poca profundidad, y en el desembocaba un curso fluvial que aportaba sedimentos originando un pequeño delta, que durante varias etapas permaneció inactivo, lo que facilitó la instalación de los arrecifes sobre él, existiendo un clima tropical con una temperatura media anual de unos 22º C, ya que estas son las necesidades actuales de estos corales (Porites sp.) que todavía persisten en los mares tropicales de nuestro planeta.
Parada 3. Paraje de la Poza
El paraje de la poza es el resultado de la erosión diferencial que han sufrido las margas con respecto a las calizas arrecifales y de la existencia de un acuífero (calizas arrecifales y sedimentos conglomerático-arenosos) impermeabilizado en su base por arcillas y margas triásicas (colores rojizos y verdosos). Este acuífero origina una surgencia de agua que ha generado un pequeño oasis de interés paisajístico, botánico y faunístico.
Para bajar a él se debe coger un camino que parte del lateral de la última casa.
Parada 4. Paraje de Los Colorados 1
En el talud de la carretera a la altura de la zona más deprimida del paraje de Los Colorados, se pueden realizar diversas observaciones:
En primer lugar podemos ver los yesos triásicos que precipitaron en lagunas costeras de hace unos 225 millones de años. Estos yesos están totalmente desorganizados y afectados por numerosas fracturas rellenas por yesos secundarios, ya que representan la base del cabalgamiento subbético sobre los materiales cretácicos del Prebético meridional, como se puede observar unos 800 m al norte de esta zona, en el cerro Algezar. Estos materiales han experimentado fenómenos de diapirismo que afectan a los sedimentos terciarios adyacentes.
Los materiales terciarios (areniscas y conglomerados) existentes en el talud de la carretera, han sido erosionados y posteriormente rellenados de sedimentos cuaternarios que originan un paleocanal.
Parada 5. Paraje de Los Colorados 2
A unos 500 m carretera delante de la parada anterior, gracias a las labores de una antigua cantera de áridos, se observa una espectacular discordancia erosiva entre los estratos subverticales triásicos de color rojo o verde-azulado y unos conglomerados subhorizontales de color claro, de edad finiterciaria-Cuaternario.
Los materiales triásicos son areniscas silíceas, totalmente descarbonatadas, con gran cantidad de micas incoloras y que presentan laminaciones cruzadas y onduladas (antiguos ripples), estructuras de paleocorrientes y una serie de trazas que recuerdan a pistas o galerías de origen orgánico. Estos materiales aparecen afectados por diversos juegos de diaclasas y fallas normales. Se trata de sedimentos fluviales, cuyo origen parece estar en la alteración y erosión de los granitos de la Meseta.
Los materiales subhorizontales son conglomerados poligénicos, formados por cantos de areniscas y yesos triásicos; de dolomías, calizas y areniscas mesozoicas; y calizas nummulíticas paleógenas; entre otros.