Entre las comunidades de fauna meramente acuáticas, los insectos son el grupo mejor adaptado a las ramblas, ya que en periodos de sequía, o de avenidas, los adultos pueden volar, buscando un nuevo cuerpo de agua donde poner sus huevos. Los grupos más ricos en especies son, con diferencia, los Dípteros y Coleópteros. Este último grupo de insectos aporta un enorme valor de conservación a las ramblas por la presencia de numerosos endemismos. Especies que solo aparecen aquí, en Murcia y en estos ambientes. Por otra parte, la mayoría de las especies de Coleópteros y Heterópteros que habitan en las ramblas son de elevado interés ecológico como bioindicadores.
Algunas de las especies exclusivas que encontramos en estos ecosistemas son: Ochthebius montesi, exclusiva de Alicante, Murcia y Almería; Ochthebius glaber, endemismo ibérico exclusivo de ramblas hipersalinas, citado por vez primera en Rambla Salada (Molina). Se cita así mismo en R. de la Parra (Abanilla) y R. Salada (Fortuna) y R. Salada (Alcantarilla); Ochthebius delgadoi, y Nebrioporus baeticus endemismos ibéricos de amplia distribución en las ramblas del sur; Agabus ramblae, recientemente descrita para la ciencia por Millán y Ribera; Nebrioporus mariae, nueva especie para España. Descrita por vez primera en Rambla de Agua Amarga y Rambla del Moro (Cieza); Eretes sticticus, y Cybister lateralimarginalis, especies raras de importante valor de conservación. Y así un largo etcétera, que se verá ampliado seguro, en los próximos años.
En cuanto a la fauna vertebrada de peces, anfibios y reptiles está bien representada en las ramblas. Se reunen en las ramblas tanto especies estrictamente acuáticas con las terrestres que buscan alimento o refugio, y aquellas que habitan los taludes.
La comunidad de peces es poco diversa, quedando limitada su presencia a las ramblas de aguas permanentes y abundante caudal. El fartet (Aphanius iberus) que encuentra en las pozas de las ramblas salinas su hábitat natural y la gambusia (Gambusia holbrooki) son dos de las especies que pueden encontrarse en estos medios, siendo la segunda mucho más abundante que la primera.
Las aves son el grupo más diverso de vertebrados asociados a las ramblas. Explotan tres tipos diferentes de ambientes: el medio acuático propiamente dicho, la vegetación riparia (carrizales y tarayales) y los taludes. De entre ellas cabe destacar por su valor de conservación especies como la Cigüeñuela (Himantopus himantopus), el Chorlitejos chico (Charadrius dubius) o el Andarríos grande (Tringa ochropus), entre otras. La comunidad de aves se hace más compleja cuando la rambla presenta un humedal asociado, situación frecuente en nuestra Región. Así como en aquellas ramblas con un saladar bien desarrollado y de relativa extensión, es frecuente la presencia de una comunidad de aves típicamente esteparia con especies como la Terrera marismeña (Calandrella rufescens) y la Curruca tomillera (Sylvia conspicillata), junto con cogujadas, tarabillas, collalbas y bisbitas, etc.
La presencia de mamíferos asociados a las ramblas, al igual que la de los peces, es limitada. En algunas ramblas de aguas permanentes puede encontrarse la rata de agua (Arvicola sapidus). En las riberas, el zorro (Vulpes vulpes) es una de las especies más frecuentes. Y son más abundantes, aunque pasan más desapercibidos el grupo de los micromamíferos, como la musaraña y musarañita (Crocidura russula y Suncus etruscus), o el Ratón de campo (Apodemus sylvaticus), y también podemos ver al Erizo común (Erinaceus algirus) entre otras especies.
Entre los anfibios destacan la Rana común (Pelophylax perezi) y distintas especies de sapos, como el Corredor, Común, de Espuelas… pero quizás el más llamativo sea el Gallipato (Pleurodeles waltl) del grupo de los urodelos, en ramblas como la de Tobarrilla (Yecla).