Hierba perenne de hasta 40 cm de altura, con cepa rizomatosa, algo leñosa o lignificada, incrustada en la roca, de la que parten y se ramifican varios tallos, erectos, verdes, cubiertos de pelos, la mayoría glandulosos. Hojas numerosas, laxas, dispuestas de forma alterna y opuesta a lo largo del tallo, lanceoladas, algo oblongas, sin peciolo, de hasta 3 cm de largo, con frecuencia algunas secas o parcialmente secas. Flores en capítulos, a su vez agrupados en panícula corimbiforme. Brácteas del involucro en 4-6 filas, lineares, con pelos largos y glándulas, de 9-12 mm, curvadas hacia afuera en su extremo; flores todas flosculadas, amarillas. Fruto de tipo aquenio, de hasta 3 mm, con vilano doble, de 6-8 mm.
Hábitat y distribución
Especie propia de roquedos calizos muy térmicos, directamente expuestos al sol, a veces a la sombra al atardecer, generalmente con pendiente media, aunque también extraplomados. Planta del Mediterráneo Occidental, ampliamente distribuida en la mitad sur, este y centro peninsular. En Murcia puede encontrarse de forma dispersa en el Noroeste y sierras prelitorales, principalmente.
Observaciones
Se trata de una hierba de tacto pegajoso y olor aromático, muy característica de junio a septiembre en los roquedos, por presentarse solitaria, con vivo color verde y en floración, a la que se atribuyen propiedades medicinales, siendo indicada por sus importantes efectos diuréticos, hipotensores, etc.
José Antonio López Espinosa