El rival del Abarán en la primera eliminatoria fue el Racing de Ferrol. El partido de ida se antojaba muy complicado pues el Ferrol jugaba en un campo de hierba, superficie a la que no estaban habituados los jugadores del Abarán. Tampoco pasaba desapercibido el historial del rival (había permanecido durante 16 temporadas consecutivas en Segunda División, desde 1944 a 1960) ni su potencial (había logrado el campeonato de su grupo demostrando una gran superioridad sobre sus oponentes).
El viaje a El Ferrol duró dos días. La primera noche la expedición del Abarán se alojó en el Hotel “Nueva Montaña” de Madrid. Posteriormente los jugadores se concentraron en la localidad de Sarria (Lugo) y realizaron sendos entrenamientos en Lugo y en Pontedeume (una población cercana a El Ferrol) para habituarse al césped.
El encuentro finalizó con victoria del Ferrol por 1-0. El tanto fue conseguido por Suco en el minuto 37 tras rematar un córner. Los abaraneros protestaron el gol al entender que en la jugada se produjo falta al portero y, además, que Suco tocó el balón con la mano. El entrenador del Abarán, consciente de la teórica superioridad del rival, realizó un planteamiento defensivo que a la postre le dio un buen resultado, puesto que la eliminatoria se iba a decidir en el campo de Las Colonias.
Encuentro de vuelta
Para preparar el partido de vuelta la plantilla del Abarán se concentró en Los Baños de Fortuna (hoy Balneario de Leana). Pese a la derrota, el club afrontó el encuentro con optimismo. Entre la afición y los jugadores existía el convencimiento de que era posible remontar la eliminatoria.
El partido de vuelta, disputado en Las Colonias, fue todo un acontecimiento social. El campo registró una entrada histórica. Los seguidores del Abarán estuvieron acompañados de centenares de aficionados desplazados desde diversos puntos de la provincia. El encuentro terminó con triunfo del Abarán por 2-1. Los locales dominaron durante la mayor parte del encuentro, pero no supieron aprovechar sus oportunidades para sentenciar el partido.
La eliminatoria había quedado igualada (durante esta época en las competiciones nacionales no se tenía en cuenta el valor doble de los goles marcados en campo contrario, en caso de empate) por lo que era necesario disputar un partido de desempate a lo largo de la semana. La directiva del Abarán ofreció al Ferrol la posibilidad de que el tercer encuentro se celebrara en La Condomina. A modo de contraprestación el Abarán se comprometía a ceder la recaudación del partido, que se estimaba que sería, como poco, de 300.000 pesetas. La directiva del Ferrol rechazó el ofrecimiento. Los dirigentes de ambos clubes no se pusieron de acuerdo en la elección del estadio en el que se debía de disputar el partido de desempate. Finalmente, tuvo que intervenir la Federación Española de Fútbol que designó el campo de Vallecas como escenario del tercer encuentro.
Partido de desempate
Este partido se celebró 48 horas después del anterior. El campo presentó una floja entrada debido a la gran distancia de ambas localidades con Madrid, y a que se celebró en un día laborable. El encuentro, que fue pródigo en incidentes, finalizó con victoria del Abarán por 4-2. En el minuto 41 el árbitro del encuentro, López Montenegro, expulsó a dos jugadores del Ferrol por agredir a sendos rivales. Mediada la segunda parte el Ferrol se quedó con siete jugadores tras sufrir dos nuevas expulsiones.
Esta victoria clasificaba al Abarán para disputar la eliminatoria final ante el Béjar Industrial de Salamanca. El vencedor de este enfrentamiento lograría el ascenso a Segunda División.