Francisco Javier Palazón Bermúdez
Si hay una cultura y sociedad que dejó en Murcia la impronta de sus avanzados sistemas hidráulicos esa es la romana. Los principios de la mecánica de fluidos, ya estudiados por los griegos, tuvieron un especial desarrollo en las obras de arquitectura e ingeniería de Vitruvio.
A las canalizaciones de cerámica se sumaron con el tiempo las de plomo y junto al ladrillo y la argamasa se labró la piedra en sillares en la construcción de arcadas para puentes y acueductos.
Balnearios y termas
Son muchos los ejemplos, concentrados sobre todo en yacimientos arqueológicos o prospecciones, de los elementos de conducción y distribución de agua.
Sin duda las estructuras más conocidas, por su complejidad y variedad de elementos, son las de balnearios y termas, tanto aquellas que aún hoy día siguen abiertas, caso de las de Archena o Fortuna, como aquellas de las que solo nos queda el recuerdo, siendo diversos los ejemplos en Cartagena y puntuales en las numerosas villas romanas que se esparcen por todo el territorio.
Pero además de las termas, no hay que olvidar las estructuras de canalización de aguas residuales, como las registradas en los substratos más antiguos de Cartagena o Begastri, las conducciones abiertas al aire libre en acueductos exteriores, o las balsas y sistemas de lavado del mineral, cuyas huellas quedan hoy día visibles en los alrededores de pueblos mazarroneros como el Coto Fortuna de Leiva, y las cubas y estructuras para la manufactura del salazón encontradas en la costa de Águilas y Mazarrón.
Aunque en menor medida, todavía son reconocibles los restos de canalizaciones muy semejantes a las acequias, utilizadas para el riego, así como aljibes y depósitos de agua utilizados para irrigar huertas, en Abanilla o Cieza, en algunos casos con complejos sistemas de sifones.
El silencio de las fuentes históricas y de los hallazgos arqueológicos correspondientes a la época postimperial romana y visigoda arroja ciertas dudas a la hora de atribuir a los futuros conquistadores musulmanes la originalidad de todos los sistemas hidráulicos murcianos.
Pero sin duda Roma contribuyó decisivamente en la implantación de elementos y estructuras.
