De 1910 a 1912
AÑO 1910
Entre los días cinco y seis de febrero de este año, y con apenas nueve horas de diferencia, se produjeron dos acontecimientos muy importantes en la historia de la Asociación de la Prensa de Cartagena.
A las siete de la tarde se celebró una Junta General Ordinaria en la que se eligió una nueva Junta Directiva que quedó formada de la siguiente manera: presidente, Miguel Pelayo; vicepresidentes, Manuel Dorda y Manuel Zamora; secretario, José Palacios; Contador, Antonio Puig; Tesorero, José Barbastro; Bibliotecario, Óscar Nevado; representante de los socios de número, Francisco Portela; vocales, Vicente Pérez Pascual, Joaquín Esteban, Juan Rodríguez, Ginés de Arlés, Manuel Antón, Eduardo Espín, Francisco Toral, Francisco Rentero, Eustasio Torrecillas, Alejandro Escribano y Antonio Martínez Muñoz. Asimismo, se acordó nombrar a Juan Palacios como Presidente Honorario. Posteriormente, se aprobaron las cuentas del año anterior y se tomó el acuerdo de celebrar una corrida de toros, nombrándose una comisión organizadora bajo la presidencia de Manuel Dorda.
Apenas nueve horas después de la elección del que sería el tercer y último presidente de la Asociación de la Prensa de Cartagena, Manuel Pelayo, se produjo el fallecimiento, a causa de una neumonía, de Obdulio Moncada, decano de los periodistas cartageneros, y primer presidente de la Asociación. Su entierro fue una gran manifestación de duelo.
El 28 de marzo, Miguel Pelayo tomó posesión de su cargo en una reunión celebrada en la Calle de la Marina Española, en la que además se procedió a la elección de Federico Amaré como bibliotecario de la Asociación en sustitución de Óscar Nevado. El 5 de mayo, se celebró la Corrida de la Prensa con la participación de los diestros, Rafael González, “Machaquito”, José García Rodríguez, “Algabeño” y Manuel Mejías, “Bienvenida”. El último acto de este año organizado por la Asociación de la Prensa fue un festival artístico-literario que tuvo lugar en el Teatro Principal el día 20 de diciembre.
AÑO 1911
Durante este año la Asociación de la Prensa participó de una forma activa en la vida cultural de Cartagena. En el mes de mayo se celebró una Junta General en la que se eligió una nueva directiva presidida por Miguel Pelayo. En la reunión, la Asociación acordó realizar gestiones para la participación en los festejos veraniegos y la creación de bibliotecas públicas con el fin de permitir el acceso de la población a los libros.
En el mes de junio la Asociación trasladó su sede al número 18 de la Calle Mayor y decidió que ésta debía de contar con una biblioteca y con una sala de lectura debido a la escasez de lugares de este tipo que existían en Cartagena. El Presidente Honorario, Juan Palacios, donó una colección de libros con su mobiliario correspondiente para que formaran parte de la futura biblioteca. Como homenaje al donante, la Asociación decidió colocar una fotografía de Palacios en un lugar preferente.
En el mes de agosto la Asociación organizó un certamen literario que contó con una aceptable participación; si bien el acto más importante de este año tuvo lugar el 23 de diciembre, día en el que tuvo lugar la celebración de una fiesta en beneficio de la biblioteca pública popular a la que acudió el poeta malagueño Salvador Rueda, quien en un banquete celebrado el mes de mayo anterior se había comprometido a participar en aquellas actividades de la Asociación que redundaran en beneficio de la difusión de la cultura.
Esta iniciativa recibió un gran respaldo por parte de las autoridades y los artistas locales. “El amplio local de la Asociación de la Prensa hallábase exquisitamente adornado con profusión de plantas y flores, cubiertas las paredes con reproducciones de cuadros famosos y retratos de pensadores ilustres, hallándose La Maja Desnuda y otras obras de Goya y El Jardín del Amor de Rubens. Las memorias de Velázquez y otras mezcladas con retratos de Victor Hugo, Cervantes, Zola, Valera, Monroy, Voltaire, Wagner, Espronceda…etc. En los ángulos se alzaban magníficas reproducciones del Dante de Suñel, el Moisés de Miguel Ángel, y la Venus de Milo, soberbia y magnífica colocada sobre la mesa en el sitio que ocupaban los señores Rueda y Valdés, que sentarónse a la cabecera, teniendo a derecha e izquierda al alcalde, autoridades civiles y militares, representantes de las sociedades y centros de recreo y cultura y socios de la prensa, artistas y literatos en número de 50, por haberse limitado los comensales por ser el salón pequeño para el pedido enorme de tarjetas que había solicitado asistir a dicho acto”. Salvador Rueda pasó las Navidades en el Palacio que tenía Antonio Espinosa en Cabo de Palos. Allí, entre los días 24 de diciembre y 6 de enero, escribió su obra “La epopeya del templo”.
AÑO 1912
Este año es el último en el que existe constancia de las actividades que realizó la Asociación de la Prensa de Cartagena. El 14 de enero se produjo la elección de la nueva Junta Directiva que quedó compuesta del siguiente modo: presidente, Miguel Pelayo; vicepresidentes, Manuel Zamora y José Barbastro; secretario, Vicente Pérez Pascual; vicesecretario, Francisco Portela; Tesorero, Manuel Dorda; bibliotecario, Ramón Caballero; representante de los socios de número, Mariano Ros; vocales, Antonio Martínez Muñoz, Antonio Puig Campillo, Emilio Peláez, Juan Letang, Gonzalo Faus, Eustasio Torrecillas y Andrés Martínez. Salvador Rueda y el orador Manuel Rodríguez Valdés fueron nombrados socios honorarios por unanimidad. Manuel Zamora propuso activar la inauguración oficial de la biblioteca pública popular, trabajar activamente para dotar a Cartagena de un museo de reproducciones y establecer una oficina de mediación a través de la cual las familias humildes pudieran informarse la suerte de sus parientes que se hallaban luchando en la Guerra de Marruecos.
Durante este año es más complicado seguir la pista de las actividades que organizó la Asociación, ya que apenas aparecen referencias de las mismas en la prensa; no obstante, existe constancia de que se mantuvo activa, al menos hasta el otoño. La Junta Directiva celebró sendas reuniones en los meses de julio y septiembre para la realización de actividades culturales. Asimismo, tenemos conocimiento de que la Asociación organizó una velada literaria que se celebró en el mes de octubre.
A partir de aquí apenas ha sido posible encontrar más referencias sobre la Asociación de la Prensa de Cartagena, que se mantuvo activa al menos hasta 1914, año en el que coincidió con la Asociación de Murcia que se había refundado en diciembre de 1913.