Cueva Antón se encuentra situada en la comarca del Río Mula; su posición en el centro de la Región, rodeada de amplias serranías, determina su carácter de transición entre las comarcas del Este y del Oeste en diversos aspectos como el climático, de cultivos y estructuras agrarias.
El río Mula discurre entre varias alineaciones montañosas que lo cierran por tres de sus lados dejándolo únicamente abierto por el Este. Estas estribaciones son, la Sierra de Ricote por el Norte, las primeras estribaciones de las Sierras Occidentales que lo hacen por el Oeste mientras que por el Sur lo hace la Sierra de Ponce y Espuña, que separan la comarca del Valle del Guadalentín.
El único acceso libre es el Este, por el que el río Mula desemboca en el Segura, y que ha servido desde la Prehistoria de vía natural de comunicación entre la vega Media del Segura (y por medio de esta el litoral) y el noroeste murciano y las tierras altas de Andalucía.
El entorno natural de Cueva Antón en época prehistórica debió ser diferente al actual, debiéndose limitar probablemente plantas como el tomillo, esparto, romero y algunos rodales de pinos. La vegetación está condicionada no sólo por el clima, también por el carácer estacional del río Mula.
Afluente por la margen derecha del río Mula, nace en la confluencia de varias ramblas y arroyos que bajan de las Sierras de Ceperos, Plaza de los Pastores y El Charco, en el término municipal de Bullas. Tras recorrer poco más de 60 km, termina desembocando en el río Segura. El régimen de río es torrencial, acentuando de este modo la escasez de cobertura vegetal protectora, alternando en épocas la ausencia total de circulación hídrica con auténticas avalanchas de agua y arrastres sólidos, dada la fuerte pendiente de su cauce.
El medio natural condicionó por tanto la subsistencia de los pobladores de Cueva Antón, cuya económica, de subsistencia, se basó únicamente, como todas las sociedades paleolíticas, en la caza de animales y recolección de frutos silvestres.