Biografía
Su pasión por la bicicleta nació con él un 20 de noviembre de 1982, es por esto que Eloy Teruel no es capaz de señalar a nadie como responsable de su afición al ciclismo, “La culpa la tengo yo porque siempre me ha gustado este mundo y en mi familia no ha habido nadie que monte en bicicleta”, explica.
Con el ciclismo corriendo por sus genes su primera bicicleta no se hizo esperar, “Era blanca con ruedas rojas, de esas que tienen todos los críos cuando son pequeños”, recuerda. Después de ella llegó una de montaña y tras muchas suplicas a su padre consiguió, al fin, su ansiada bicicleta de carretera, “No iba bien en los estudios y mi padre no quería comprarme la bici, pero le insistí mucho y acabo cediendo”.
Con el primer obstáculo superado el siguiente paso fue federarse, “Tenía 15 años y en la primera categoría que corrí fue en cadetes de segundo año. Corría sin equipo y por libre pero eso era algo que no me importaba demasiado”, comenta.
Al no tener equipo Eloy corría sin un maillot fijo, un día su madre vio uno muy colorido que le gustó y se lo compró. Eloy se presentó en Molina de Segura con su nuevo maillot dispuesto a intentar, al menos acabar la carrera, pero fue protagonista antes de empezar. “Mi madre me había comprado el maillot de campeón del mundo y un juez se me acercó y me dijo que por esta vez me dejaba correr pero que no podía volver a utilizarlo. Creo que soy el único murciano que ha participado en una carrera con el maillot del Campeón del mundo”, recuerda.
Sus comienzos
Sin embargo, sus comienzos no fueron todo lo buenos que cabe esperar, “Mi primera carrera fue en Los Garres y no terminé porque hubo una caída y me quedé cortado, pero no me desanimé”, recuerda. Ese año, 1998, participó en cinco carreras más y sólo consiguió terminar dos, una en Santomera y una contrarreloj individual de 4,5 kilómetros “Si no hubiese terminado esa, entonces sí que me podía haber retirado del ciclismo”, comenta entre risas.
Tras esta primera toma de contacto Eloy afrontó su segundo año como ciclista en el equipo Moto5 y allí coincidió con Pedro Martínez, ciclista con el que este año vuelve a compartir equipo.
En Juveniles de segundo año y en un nuevo equipo, el Estrella de Levante, llegó su primera victoria “Fue en Archena y lo recuerdo como uno de mis mejores días en el ciclismo, además mi padre fue a verme así que la cosa no pudo salir mejor”, explica.
Ciclista de carretera y de pista
Tras su paso por Juveniles, Eloy afrontó su primera temporada en aficionados en un nuevo equipo, el Hierros Agüera. Con 18 años el ciclismo empezaba a ser algo más serio y en esta temporada decidió dar el salto a la pista “En juveniles había ido a ver cómo me iba aunque no llegué a competir, pero este año Pedro Pablo me dijo que probase y la verdad es que me gustó mucho”. Eloy pasó de conformarse con hacer puestos del 15 al 20 en carretera a conseguir un medalla de bronce en el Campeonato de España de persecución individual en pista, pero fue en la temporada siguiente, en el equipo Grefusa, cuando realmente se dio cuenta de que el ciclismo estaba hecho para él. “En el año 2003 gané una etapa en la Ruta del Vino y fui 5º en la general, esto me convenció de que podía dar el gran salto”, recuerda.
Aún así la dificultad de pasar al ciclismo profesional siempre ha estado muy presente, por eso cuando en octubre acababa la temporada y se aparcaba un poco la bicicleta, Eloy cogía la brocha gorda y trabajaba como pintor durante los tres meses que descansaba la competición.
Sin embargo cuando empezaba febrero, volvía a ponerse el culotte y el maillot y cruzaba los dedos para no tener que volver a pintar. Así empezó su temporada 2004 en el equipo Murcia Turística. Tras su confirmación, el año anterior con victorias de prestigio, este año siguió la racha con tres victorias más en la Challenge de Valencia, una etapa en la Vuelta a Cartagena y el Gran Premio Cuesta Moreno de Cehegín.
Su última temporada como sub-23
En 2005, su último año antes de pasar al ciclismo profesional, Eloy Teruel volvió a cambiar de equipo y se fue a las filas del Soctec, allí consiguió imponerse en La Cresta del Gallo y fue segundo en el Trofeo Guerrita, prueba que puntúa para la Copa de España. Pero su mayor logro llegó después del Gran Premio Macario, cuando Eloy se puso líder de la Copa de España y llegó como tal al Valenciaga.
Eloy recuerda su última temporada como ciclista no profesional con un sabor agridulce “Estuve todo el año peleando por la Copa de España y llegué a la última carrera a cinco puntos del líder, pero el fallecimiento de un amigo que había ido a verme a esa última carrera hizo que no saliese a correr”, recuerda.
Eloy no pudo brindarle a José su victoria en la Copa de España pero sí todas las que vinieron después y las que seguro vendrán.
En 2006, el sueño que había estado persiguiendo durante años se ha hecho realidad y Eloy Teruel es ya ciclista profesional con el equipo Resort 3 Molinos Murcia Turística.
Ahora sólo espera dos cosas; no tener que volver a enfundarse el mono de pintor y poder volver a disputar una carrera con un maillot de colores como el que le compró su madre.