Historia del Ciclismo

Nació en Murcia el año de 1916 y se casó con 25 años, pero desde muy joven comenzó un dilatado historial ciclístico que duró casi un cuarto de siglo. Tras participar en la carrera Murcia-Cieza, se lanzó, con 16 años, a vivir su primera gran aventura que le llevó a Barcelona en 1932, con un billete de tren falso, para poder participar en la Vuelta a Cataluña donde su esfuerzo resultó testimonial, como era de esperar.  No obstante fue una buena experiencia y al año siguiente, comenzó ya a cosechar algún que otro resultado. La prueba era de 29 km, el recorrido: Murcia-Venta de la Paloma-Alberca-Beniaján-Murcia y en ella obtuvo un honroso cuarto puesto. 

En 1934 quedó tercero, detrás de José Ruíz Conesa y Miguel Carrión, en el Campeonato Provincial con 110 km de longitud y un itinerario que iba de: Murcia-Archena-Mula-Pliego-Alhama-Murcia.  Sin embargo,  no tuvo suerte en la Vuelta a los Puertos de Madrid que se celebró en 1936 y lo dejó en décimo octavo lugar. 

La Guerra Civil fue paro obligado en su carrera, pero en 1940 estaba de nuevo compitiendo sobre la bicicleta. Aquel mismo año ganó la carrera que se organizó con motivo de la Feria de Murcia; en 1942 fueron suyas las pruebas de Orihuela, Murcia-Cieza y Torre Pacheco; se alzó con el Gran Premio otorgado por la casa de películas CIFESA y consiguió un reputado 5º puesto en la durísima carrera Madrid-Valencia, disputada en una sola etapa de 13 horas de duración.  También en aquel atareado 1942 estuvo presente en la Vuelta Ciclista a España, en la que logró el cuarto puesto en la etapa reina a pesar de haber perdido en ella un pedal, hazaña que le deparó el título de hombre más fuerte de la competición.  Indudablemente, estaba en forma y además era su año, prueba de ello es  que ganó el Campeonato de España superando a José Jabardo y a un Vicente Carretero, entre otros grandes y afamados corredores.

Nada menos que pedaleando al sprint, ganó en 1943 la vuelta a Jumilla y, a continuación volvió a participar en la carrera organizada por CIFESA.  El resto de aquella su década prodigiosa estuvo llena de pruebas y competiciones un poco por todas partes, Cartagena, Torre Pacheco, Lorca... en las que se alzó con el triunfo absoluto en la Vuelta ciclista a Alicante, otra carrera en circuito urbano celebrada en Lorca en la que, por cierto, en vez de trofeo recibió 18 duros de plata en primas.  Pero en 1954 todavía continuaba al pedal en duras justas como la Vuelta a los Puertos de Madrid, en la que fue suya la etapa de montaña. 

A pesar de sus sobrados méritos, circunstancias adversas le hicieron perder la oportunidad, en 1942, de ser patrocinado por el equipo Faema.  Con los años acabó abriendo un negocio de recambios de motos y bicicletas, llegando a ser un año mecánico del equipo español en el Tour.