Diego Flomesta Moya (Bullas 1890 – Annual 1921) ingresó en 1911 como alumno de la Academia de Artillería. Tras los cinco años del plan de estudios fue promovido a Teniente de Artillería y es destinado al 2º Batallón de Artillería de Posición en Mérida y poco después al 6º Batallón de Artillería de Posición en Murcia.
El 5 de mayo de 1920 tomó el mando de la Sección de Automóviles de esta Comandancia de Artillería, interviniendo en las operaciones para la ocupación de Arrayen, Lao, Cheif y Tamamsin Norte en Marruecos. Quedó destacado en esta última posición, al mando de la Batería de Posición hasta el 2 de Julio que regresó a Melilla. El 1 de Agosto del mismo año 1920 marchó a mandar el Destacamento del Draa n1 1, donde permaneció hasta el 14 de diciembre al ser trasladado con el Destacamento a la nueva posición de Bu-Hermana, y poco después fue destinado al Regimiento Mixto de Artillería de Melilla.
A principios de 1921 se incorporó a la Batería de Annual, y el 1 de junio de ese año salió al mando de la Batería formando parte de la Columna a las órdenes del Comandante Jesús Villar, asistiendo a la operación que dio como resultado la ocupación de Abarrán, quedando destacado en esta posición.
Las fuerzas españolas se dedicaron a fortificarla, pero ese mismo día fueron atacados por un numeroso contingente. Tras varias horas de combate, caen los oficiales, y toma el mando el Teniente Flomesta quien, pese a estar herido, mantiene la defensa. Sin embargo al agotarse la munición Flomesta decide inutilizar los cañones antes de caer herido de nuevo y por fin, ser hecho prisionero.
Flomesta fue llevado cautivo a un poblado próximo donde le atendieron con solicitud con el proposito de que, una vez curado, enseñase a sus enemigos el manejo de las piezas que habían caido en poder de éstos. Al enterarse de esto Flomesta se niega a secundarlos y se arranca los vendajes de sus heridas, prefiriendo morir antes que verse obligado a prestar ese servicio.
Para vencer tan inesperada reistencia, los rifeños decidieron privarle de todo alimento, sin embargo ni así consiguieron domar se ferrea voluntad. Y fallece al mes justo de su cautiverio, el 30 de Junio de 1921.
En 1923 se le concedió la Cruz de San Fernando.