A través de la carretera que une Lorca con la pedanía de Campo López, en las estribaciones de la Sierra de Almenara nos encontramos escondido el conocido como Caserío del Mesillo.
Se trata de un amplio despoblado en el que se encuentran repartidas en una extensión de varios kilómetros pequeños casas de campo que dependían de esta construcción principal.
Las transformaciones realizadas en los alrededores de la casa principal son evidentes, se han realizado aterrazamientos para el cultivo. Destaca visualmente las plantaciones de olivos, que aún hoy se mantienen en pie. Estos fueron el cultivo principal del caserío como denota los restos de la antigua almazara que forma parte del conjunto.
El cauce de la rambla, que lindaba con el caserío, se encuentra reforzado por obras para evitar las venidas; que sobre todo son en los cambios de dirección de las aguas, para ello se construyeron fuertes muros de mampostería; pero también un sistema hidráulico que constaba de un azud y una boquera con tajamar de sillería que llevaría parte del caudal para el riego.
