Túneles[Batería de Trincabotijas Alta Cartagena]
Túneles

     Los orígenes de un emplazamiento artillero en la punta de Trincabotijas se remontan al siglo XVII, cuando un conocido experimento disparando un cañón desde aquel estratégico punto demostró la eficacia del fuego de artillería emplazado en la bocana del puerto de Cartagena, lo que podría evitar un ataque naval enemigo desde el interior mismo de la bahía.

     Finalmente se construyó, a finales del siglo XVII, una batería cuyos cañones se montaron a barbeta, para ejercer su influencia sobre la entrada al puerto cartagenero, la ensenada de Escombreras, y los pequeños fondeaderos de las Algamecas. Pero un derrumbe de la plataforma natural en la que se situó este fuerte lo llevó a la ruina, por lo que hubo de reconstruirse una nueva batería hacia 1770, ya en el contexto de las grandes obras militares que, por aquellos años, se llevaban a cabo en la ciudad.

     El Plan de Defensa de 1860 dispuso la creación de dos emplazamientos diferenciados, Trincabotijas Baja y Alta, que constituirían parte de las defensas portuarias durante la Guerra del Cantón (1873-1874). Pero los rápidos cambios tecnológicos llevarían a una nueva reforma de estas baterías a finales del siglo XIX, que artilló la Alta con obuses "Ordóñez" de 260 mm montados a barbeta. En 1911, se le bautizó como "Comandante Royo", en memoria del héroe de la Guerra de Marruecos.

     Con el despliegue de las piezas Vickers como resultado del Plan de Defensa de 1926, esta batería fue quedando progresivamente desfasada, hasta el desmontaje de sus piezas y su conversión en polvorín tras la Guerra Civil. Esta circunstancia provocó, en 1950, una enorme explosión que hizo desaparecer una de las barbetas. Actualmente se encuentra abandonada y sin uso.