Arquitectura y Zonas
Descripción arquitectónica
El templo de Santiago responde al tipo de planta basilical, con tres naves, la central más ancha y alta que las laterales. En las naves laterales aparecen capillas adosadas, así como también a ambos lados de la cabecera. A los pies del templo se encuentra el coro.
Artesonado de estilo mudéjar
La nave central está cubierta con una armadura de par y nudillo (con decoración geométrica), entendiendo por tal aquella en la que los maderos transversales (par) que van desde la cabeza de la cubierta a la parte superior de los estribos o maderos dispuestos horizontalmente encima del muro, se engarzan a un madero plano que forma el almizate (nudillo), siendo el perfil de la armadura trapezoidal.
La planta
En planta se configura como una forma rectangular de 41 metros de largo (sin contar el espacio que ocupa el camarín y que se abrió posteriormente) y 19,5 metros de ancho. Este tipo de planta ofreció la posibilidad de disponer de una mayor capacidad de congregar a los fieles, a la vez que más espacio para los enterramientos.
Decoración interior
En el interior de la iglesia se colocó en el siglo XVIII, una moldura a modo de cornisa. Destacar la actual decoración con el contraste del blanco del cuerpo de los pilares con el azul de las cornisas. Esta actuación ha conseguido recuperar la presencia del azul, como color ya utilizado con anterioridad, al menos así se recoge en las obras de enlucido que se llevaron a cabo en el templo en 1876.
Exterior del edificio
En el exterior del conjunto parroquial la escasez y poca amplitud de las aberturas le confieren un aspecto de fortaleza, además la presencia de vidrieras y ventanas que en otros momentos jugaron un importante papel hoy se encuentran cegadas en parte, así ocurre con el camarín de Santiago, del Rosario, de la antigua capilla de Santa Lucía, etc. En los paramentos exteriores se combinan verdugadas de ladrillo con yeserías, sobre las que se realizaron ciertos esgrafiados centrados en los aleros y remates.
La entrada principal se efectúa por la puerta de apertura a la plaza pública. La portada labrada en piedra posee dos pilastras adosadas y dos columnas de orden compuesto que descansan sobre basamento de piedra. Aparecen estas columnas estriadas en un tercio de su fuste y lisas en el resto. Entre las pilastras y las columnas se sitúa una hornacina a cada lado. La portada es de estilo barroco, por el empleo de la línea quebrada de su cornisa y el uso de ciertos elementos decorativos como rocallas. En el tímpano un trabajo muy cercano a lo plateresco, no cronológicamente, sino estilísticamente; nos presenta toda una filigrana de rocallas, medallones y orlas, sostenidas por un ángel a cada lado de sus extremos.
La llamada puerta de abajo, con salida lateral a la fachada sur se debió de abrir en las últimas décadas del siglo XVII. Este Espacio de salida aparece retranqueado. Quedan concluidos para el segundo cuarto del siglo XVIII los tres accesos actuales al templo parroquial.
Capillas pertenecientes a la Iglesia
A partir del año 1580 se inicia la construcción de diversas capillas que se distribuyen a lo largo del lado del Evangelio y de la Epístola:
Lado del Evangelio
Capilla de San Ildefonso. La orden de construcción corresponde al regidor Alonso Ramos, en torno a la década de 1570-80, como capilla funeraria. El retablo de la capilla está dedicado al titular San Ildefonso y cuyo motivo central es la imposición de la casulla por parte de la Virgen al santo.
Capilla del Santísimo Sacramento. Levantada en el año 1585 por la cofradía de su mismo nombre como capilla de enterramiento y de celebración de sus actos litúrgicos. La segunda parte de esta capilla es construida en el S. XVIII por la cofradía del Santo Entierro y de la Soledad de Ntra. Señora.
Capilla de Ntra. Sra. del Carmen. Construida como capilla funeraria a finales del S. XVII por orden de D. Andrés de Mora-Ferrer y Martínez.
Lado de la Epístola
Capilla del Baptisterio. Construida en el S. XVIII y conocida también como del Señor de la Paciencia. Capilla con bóveda y linterna, con decoración floral. Los lienzos de las pechinas y de los arcos torales se corresponden con los primitivos del S. XVIII.
Capilla de San Antonio Abad. Construida en el S. XVIII. Es de destacar su retablo barroco, decorado con formas vegetales y ornamentos frutales.
Capilla de Santa Ana. Únicamente se conserva la reja realizada en el S. XVIII.
Capilla de San Antonio de Padua. Levantada en el S. XVIII a expensas de D. Diego Sánchez Carralero, vicario de Totana, y de las limosnas de los vecinos. Se conserva de ella el retablo del titular S. Antonio de Padua.
Capilla de Santa Lucía. Se corresponde con la zona de la capilla actual donde está situada la Virgen del Pilar. Es de destacar la reja de forja que cierra la capilla, de autor desconocido y al parecer del S. XIX. Capilla del Corazón de Jesús
Capillas laterales al altar mayor
Capilla de Ntra. Sra. del Rosario. Construida por la cofradía del mismo nombre hacia 1664. En 1672 se le encarga a Antonio Caro, que se encontraba construyendo el retablo Mayor, tallar uno para esta capilla, el cual fue utilizado después de la Guerra Civil para reconstruir el retablo Mayor; con lo que la parte superior del actual retablo es el precedente de esta capilla. La reja de forja que encierra esta capilla fue realizada en el S. XIX.
Capilla del Dulce Nombre. Se ordena construir en 1679 por esta cofradía. El pequeño retablo que se conoce en la actualidad fue compuesto por Ginés Martínez Rosa, después de la Guerra Civil, aprovechando los restos de otros y completándolo de modo propio.