La Iglesia de Santa Eulalia de Mérida está situada en las estribaciones de Sierra Espuña, a tres kilómetros de Aledo y siete de Totana, en un entorno natural de abundante vegetación.
La ermita del siglo XVI, desde el punto de vista arquitectónico, no parece haber sufrido grandes reformas. No obstante, cabe destacar la transformación del espacio al añadir el último cuerpo de la obra, que constituye una unidad independiente que prolonga la nave del templo.
Los muros están cubiertos por pinturas donde se recogen diversos pasajes de la vida de la Santa, escenas de la Pasión de Cristo, y otras donde se representan milagros de Santa Eulalia.
La techumbre es una reproducción en pequeño de la armadura de Santiago de Totana, realizada hacia 1595, cuando la parroquia llevaba veinte años acabada, es probable que sea copia de otros maestros, ya que para entonces Esteban Riberón, el autor de la iglesia de Totana, debía haber muerto. Está constituida por una armadura de par y nudillo rectangular, con los cuatro paños de igual inclinación, pero que al añadirse la capilla mayor se debió suprimir el faldón del testero del ábside. Corresponde al tipo frecuentemente utilizado en la zona con limas moamares y tirantes a pares calados. Como en la iglesia de Santiago de Totana, el almizate sólo está decorado con lazos de a ocho en los extremos y en el centro donde surge un cuadrado semejante al de la cabecera y los pies.
Alrededor de la ermita se fueron construyendo diversas instalaciones, formando un conjunto de gran interés por su integración con el paisaje y con la propia ermita origen del complejo. Aunque estos edificios son de diferentes épocas y diseño, enlazan gracias a sus proporciones, materiales y color con el entorno de forma singular y bella.
A esta ermita se fueron adosando diferentes edificios y dependencias desde finales del siglo XVII hasta el siglo XIX, constituyendo todos ellos el santuario que conocemos en la actualidad. Según J.M. Munuera, poco después de terminado el templo se hicieron las casas de la ermita y del Concejo. El 6 de abril de 1688 el Concejo edificó dos habitaciones para su servicio, en 1693 se construyeron el cuarto alto y el comedor, y en 1741 se agrandaron las casas de los clérigos. En cuanto a la ampliación de la ermita, el investigador citado fecha en 1712 la inauguración del camarín. La sacristía bajo el camarín sería de 1736 y el porche de 1737. El resto de construcciones con los corredores son del siglo XIX así como el patio del noroeste.
Consta una lápida conmemorativa que dice ”En abril de 1878, siendo Cura Ecónomo de esta Villa y Arcipreste de la misma y su partido Francisco Vigueras y Cordova, y Alcaide 1º el Sr. Mariano Gariguez y Navarro, se puso esta puerta principal, se edificó la torre y colocó el reloj por el Mayordomo de este Santuario el Coronel retirado D. Vicente Cánovas y Aledo”.
Entre 1662 y 1693 se construyeron respectivamente las Salas del Concejo y del Clero y el Comedor Grande, necesarios el día de la romería, reformados a finales del siglo XIX y mediados del XX.