Recuperación del edificio y de su historia
Dieciséis años ha costado recuperar todo el conjunto arquitectónico de los Baños, una recuperación del patrimonio arqueológico destinada a constatar, desde tiempos del Imperio Romano pasando por el período de conquista musulmana hasta el pasado siglo XIX, la utilización de estas termas.
Toda esta historia, grabada en piedra, y gracias a la capacidad técnica de la construcción actual, se puede mostrar al público hoy día. Y no sólo las dependencias, sino también la manera en la que estos yacimientos naturales de agua termal se explotaron.
Culturas que han utilizado este manantial
Dos mil años han sido utilizadas las instalaciones de los Baños de Alhama, desde el s. I al III d.C, por los romanos, que aún en su crisis imperial utilizaron dos de sus salas medicinales.
En el siglo XII, Al-Idrisi deja prueba de la existencia de los baños y durante el siglo XIII hay algunas fuentes que también indican una descripción de los mismos.
Durante el siglo XVII, los baños siguen siendo visitados y las fuentes documentales citan a los franciscanos como fundadores cerca del lugar de un hospicio para enfermos.
La construcción de un Hotel Balneario, regentado por don José María Andreo Sevilla y su esposa doña María Munuera Caja, se hace en el siglo XIX. En la actualidad bañeras de este período y hasta un piano han sido cedidos por los herederos de la familia Andreo para ser expuestos en el museo.
La Guerra Civil convirtió este edificio en Hospital, y tras finalizar la guerra se cerró, siendo demolido en 1972.
Manantiales del Balneario y sus propiedades
Eran cuatro los manantiales utilizados por el balneario desde tiempos pasados. Dos de ellos dentro del complejo termal, otro fuera del él, pero próximo a las instalaciones, y el cuarto a doce kilómetros exactamente de su ubicación. Desde el último de estos manantiales se transportaba el agua que servía para beber o para baños y pulverizaciones, ya que era el único manantial del que brotaba agua fría a diecinueve grados centígrados. De los otros tres manantiales el agua brotaba caliente, a 36 grados centígrados.
Las propiedades que se le atribuían eran sedantes, relajantes y combativas de la fatiga muscular. En la actualidad se está llevando a cabo una investigación de las características reales terapéuticas y medicinales que pueda tener el manantial, con el objetivo de poder hacer un complejo turístico de termas con baños y piscinas, donde se puedan dar servicios de descanso, medicinales, deportivos y de ocio, que serviría para ampliar el interés que Alhama ha tenido siempre por sus afloramientos de aguas termales.