La Casa de los Coy se construye en el siglo XVIII y en sus reformas se ha querido mantener el estilo que le fue dado en su inicio.
En el siglo XX es cuando más se valora estas edificaciones que son una muestra de un estilo de vida de siglos pasados, donde por medio de la arquitectura y sus diferentes adornos intentaban dar una imagen de poder a la población.
Sin duda, el hacer que sus escudos estuvieran en lugar preferente de la edificación es otra muestra más de esa intencionalidad.
Se le denomina también la Casa de los Borrajos, un linaje de origen gallego, aunque no coincide el escudo, que quizás simbolice una unión de dos grandes familias por medio de matrimonio. El escudo de los Borrajos está constituido en campo de plata con banda jaquelada de oro y gules, engolada de dragantes y sinople. El que tiene la fachada pertenece a los Coy. Está cuartelado en cruz, con puente torreado en primer cuadrante y cuarto, y bandas en segundo y tercero. Adornado con hojas de acanto y timbrado con casco de armadura mirando hacia su derecha y adornado con gran penacho.
Una construcción del setecientos, de estilo barroco; la rejería rica en cada uno de sus balcones y ventanas es copia de la originaria.
Los dos pisos y el sobrado la hacen ser una gran casa de las llamadas blasonadas, por el escudo que las presenta.
Haciendo esquina, entre dos calles importantes de Mula, La de Botica y la de Poncio, esta justo enfrente de la esquina que hace la Casa Consistorial, y la Plaza del Ayuntamiento.