El despoblado de Siyâsa -situado en el cerro del Castillo, junto a la actual Cieza-, es, sin duda, uno de los yacimientos arqueológicos con más historia y más interesantes del Islam occidental. Fue excavado durante los años 80 bajo la dirección de Julio Navarro, recuperándose una manzana de 19 casas y una impresionante colección de objetos, especialmente cerámicas, vidrios y elementos arquitectónicos en yeso, que se exhibe en el Museo de Siyâsa, en Cieza.
Siyâsa estaba emplazada en un punto estratégico, puesto que el valle del Segura constituía la vía de comunicación natural entre el Sureste y el interior peninsular. La agricultura constituía, indudablemente, la principal fuente de recursos de Siyâsa. La producción estaba basada, fundamentalmente, en el regadío que aprovechaba las fuentes y el generoso caudal del río Segura.