Ermita de la Majada

Recorrido por su Historia

En los campos de Mazarrón se encontraban siete ermitas con culto, que eran frecuentadas por labradores y pastores. En torno a ellas se agrupan, formando pequeñas entidades a efectos no sólo religiosos, sino también administrativos, al estar los vecinos diseminados en caseríos.

Hay ermitas en Morata, Ifre, Gañuelas, Romeros, Leiva y Majada, además está la llamada ermita nueva. En 1768 se pueden contar doce ermitas; nueve están decorosas y bien atendidas mientras que tres (Mingrano, Ifre y Encarnaciones) deben repararse.

En los cabildos del Concejo existe constancia de la costumbre de citar a consulta en las salas capitulares a sus capellanes junto a dos cristianos buenos del lugar.

Esta ermita que el Cardenal Belluga quiso que se erigiese en la Majada tiene una inscripción en su entrada que dice así:

'D. Luis Belluga, Obispo de Cartagena y Cardenal. Dio licencia a Laurencio Vivancos García y Juan Molino. Vecinos de la Villa de Mazarrón para que construyeran la ermita de las Majadas en 21 de Marzo de 1715.

Por solicitud presentada a el efecto, siendo Capellán el Doctor D. Pedro Zamora de Vivancos y mayordomos Fernando Lardin Vivancos y Francisco Mendez Vidal se construyó e hizo esta obra de la nave, con ayuda de sus respectivos vecinos en 13 de Noviembre de 1735 por dirección del Maestro Ríos Marín.'

En 1981 el párroco que atendía en ese momento la ermita, Don Juan Belchi Arévalo, mandó una carta al Delegado de Cultura, Pedro Andujar Naval, con motivo de recibir una subvención para la restauración de las pinturas que se encontraban en muy mal estado.

El personaje

La ermita de la Majada tiene en la figura del Cardenal Belluga al máximo responsable de su construccción, ya que fue quien dio licencia a Laurencio Vivancos García y Juan Molino, vecinos de la Villa de Mazarrón, para que construyeran la ermita de la Majada en 21 de Marzo de 1715.