Propiedad de los señores de Archena
El primer propietario de la Casa Grande fue la Orden Militar de San Juan, que se origina con las cruzadas en el siglo XII.
Ir a combatir al infiel a los Santos Lugares es su objetivo. Para ello, además de tener fe, deben constituir una orden combatiente, ser, en definitiva, monjes con sus reglas monásticas austeras y militares guerreros.
Una vez que empieza la Reconquista en la Península Ibérica y los territorios son recuperados por los distintos monarcas hispánicos, éstos contarán con las Ordenes Militares, sobre todo para defender los territorios, los cuales obtienenen como recompensa, actuando en ellos como señores.
En Archena, es en el siglo XIII cuando, por la ayuda prestada, se les concede toda la villa y sus tierras.
En el s. XV construirán la Casa de la Tercia, en la actualidad la Casa Grande.
Sería una vivienda más en el s. XVIII, cuando la compra la Familia Llamas.
A principios del s. XIX el edificio del Ayuntamiento, que había sido construido para tal menester a finales del S. XVIII, queda reducido a cenizas por una gran explosión. Será de nuevo la familia Llamas la que permita que se trasladen a Casa Grande las reuniones del Concejo y se ubicara allí el Arca con las tres llaves donde se guardaban los pocos documentos que podrían haber quedado y los futuros que se irían archivando.
En 1836 la casa se divide por motivos de herencia. Por ello el Ayuntamiento pasa a arrendar otros edificios, hasta que se construye una casa de estilo moderno en la Calle Mayor, la que será ayuntamiento hasta que de nuevo, a finales del s. XX, se hace una nueva remodelación y restauración de la Casa Grande y se traslada el Ayuntamiento, dejando el antiguo como Archivo Municipal.