Configurado en una gran manzana, y con una larga historia que se pone de manifiesto en el hecho de que el Jardín de Floridablanca fue el primer jardín público que se abrió en España, ocupa actualmente una superficie de 11.330 m2 en el corazón del barrio del Carmen, una de las zonas de mayor solera de la ciudad. El jardín ha sido tradicionalmente usado como una zona de esparcimiento y para la realización de ferias y festejos.
No en vano se trata del primer espacio público de la ciudad, característica a la que hay que unir su cómoda comunicación con el resto de la ciudad.
El jardín debe su nombre a José Moñino, Conde de Floridablanca. En el propio jardín puede verse un busto del ilustre murciano.