Historia
La edificación de la casa o su remodelación principal se produjo en el siglo XVIII, cuando pasa a ser propiedad de la Familia Requena, que para dar constancia de su linaje, coloca en su fachada principal los símbolos principales de sus orígenes.
En 1929 la casa es adquirida por la familia Rivera Rocamora, de la Roda, provincia de Albacete, a los antiguos propietarios, reservándose el derecho a quitar la fachada para trasladarla a sus posesiones. Esto no ocurrió y la familia que la disfruta hoy como vivienda mantiene su fachada exactamente como estaba al comprarla.
El escudo tiene unas dimensiones de 315 por 85 centímetros, mientras que su elaborado labrado de piedra no se ha desfigurado con el pasar de los años y hoy se puede admirar como conjunto artístico de la Casa Cabrera de Abanilla.