Museo Arqueologico Calasparra. El hombre y el trabajo del Silex
Museo Arqueologico Calasparra. El hombre y el trabajo del Silex
Museo Arqueologico Calasparra. Jarra Esgrafiada
Museo Arqueologico Calasparra. Jarra Esgrafiada

El Museo Arqueológico de La Encomienda conserva y expone los restos de la cultura  hallados en el término municipal de la villa y su entorno, desde el Paleolítico hasta la cultura musulmana del s. XIII, si bien está llamado en el futuro, tras finalizar la ampliación prevista, a albergar un mayor número de objetos y a una redistribución de sus piezas.

El museo cuenta, con casi 700 objetos relacionados con la Arqueología y las Ciencias Naturales. Destacan, dentro de la colección arqueológica, los hallazgos islámicos del yacimiento de la Villa Vieja.

En cuanto a las Ciencias Naturales el Museo alberga también una importante colección geológica y paleontológica, tanto de fósiles, como de minerales.

Prehistoria

El término municipal de Calasparra ha estado habitado desde el Paleolítico Inferior, en yacimientos situados en el paraje de los Almadenes, junto al río Segura, en donde aparece una industria lítica que, debido a su descontextualización,  ofrece problemas a la hora de encuadrarla cronológicamente.

Igualmente, posee una estación de arte rupestre, el Abrigo del Pozo, de época Eneolítica, declarada B.I.C. (Bien de Interés Cultural) y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

En el trabajo del sílex, encontramos desde un protobifaz del Paleolítico inferior, diversas raederas Musterienses, hasta varias puntas de flecha de aletas y pedúnculo.

Eneolítico

A partir del III milenio, con el Calcolítico, se inician los primeros ensayos de las comunidades humanas con el arte de la metalurgia. En el II milenio conocen la aleación del bronce y los poblados comienzan a perfeccionar sus estructuras defensivas, como ocurre en los yacimientos de La Presa I y la Presa II.

Con posterioridad, la cultura Argárica, impondrá modelos nuevos de enterramientos (cistas de piedra y pithoi). Yacimientos de esta época son, por ejemplo, El Castillico, El cerro de la Virgen y La Mulata.

Encontramos cerámica del tipo tulipa, cuencos, vasijas lenticulares , hachas de piedra pulimentada, adornos personales (collar de conchas y hueso) y es especialmente representativo un enterramiento en Pithoi.

Neolítico

Terminada la economía depredadora del Paleolítico, aparecen los primeros signos de la evolución hacia una sociedad productora, que practica la agricultura y la ganadería y que habita en poblados estables al aire libre.

Muestra de estas labores son la presencia de hachas de piedra pulimentada,tanto las de uso común como las votivas,  molinos de piedra para el grano y dientes de hoz de sílex.

Antigüedad

Cultura Ibérica

En esta época (Siglos VII ' I a.C) se consolida la metalurgia del hierro. También se intensifican los contactos comerciales y culturales por el Mediterráneo. Debió ser importantísimo el comercio de telas, muestra de ellos son las múltiples pesas de telar que aparecen en los yacimientos.

Cobra importancia  el estatus social ocupado por los guerreros en la sociedad, de cuyo armamento se conservan ejemplos importantes en el museo.

De especial interés resulta el ajuar de un guerrero ibérico, compuesto por varias armas: Falcata, puñal triangular o de antenas, cuchillo afalcatado, puntas de lanza, pilum...

Romanización

El cercano paraje de Gilico, con yacimientos tales como el situado en el Cortijo de los Panes o el de los Baños, es una vía que une Calasparra con Cehegín, desembocando en la ciudad tardorromana de Begastri , que ha dado muchas muestras y vestigios de la romanización de la zona.

Muy interesante y bien conservado es un ajuar funerario, de tradición indígena, encontrado en el paraje de Gilico, compuesto por 4 Pithiskoi, 2 Escudillas y un lagrimario de cristal (Siglo I a.C.).

De igual forma, se conservan tégulas, restos de suelo (Opus Spicatum), fragmentos de sigillata y monedas.

Edad Media

Las excavaciones arqueológicas realizadas en Villa Vieja, aportan información sobre las formas de vida en las alquerías rurales de época andalusí.

Situada en la margen derecha del río Segura, a 2 km. de Calasparra, ocupa una extensión de 5.500 m. cuadrados. El hábitat de Villa Vieja fue dilatado en el tiempo, ocupándose desde el Siglo XI hasta  que se abandonó cuando fue sofocada la rebelión mudéjar de 1264-1266.

Se ha construido allí, un Centro de Interpretación, financiado con fondos FEDER, que se integra en el proyecto Urbanismo islámico en el sur de la Península Ibérica y norte de África, dentro de la Acción Piloto de Cooperación Portugal-España-Marruecos.

El museo alberga, tanto en su sala de exposición como en sus fondos, toda la cultura material hallada en dicho yacimiento.

Tras la rebelión mudéjar de 1264-1266, Alfonso X pide ayuda a su suegro Jaime I para 'reconquistar' las tierras del reino de Tudmîr y así devolverle la soberanía del territorio a Castilla.

Teniendo en cuenta que Calasparra es territorio fronterizo con el reino de Granada, último reino musulmán vigente en Al-Andalus, las escaramuzas en la zona debieron ser continuadas, por lo que en núcleo de Villa Vieja se abandona, prefiriendo la población cristiana asentarse bajo las faldas del Castillo, núcleo actual de la localidad, para confiarse así una defensa más eficaz.

La pieza islámica de mayor valor arqueológico es la jarrita esgrafiada de principios del siglo XIII, pero no la única. El museo alberga toda una representación del ajuar doméstico usado en la villa durante  esta época.

Así, podemos encontrar, desde elementos arquitectónicos, como un arquillo de yeso, una jamba..., pasando por elementos de hierro y bronce ( badila, anillo, hebilla, punta de ballesta, hoz ...), vidrio (diversos cacharritos y botellas contenedoras de esencias y perfumes), objetos de hueso (botones, mango de un cuchillo...) y toda la vajilla utilizada en cualquier vivienda árabe: Ataifores, Jofainas, Cuencos, Redomas, Jarritas (pintadas y de cuerda seca), Jarros, Alcadafes, Ollas, Cazuelas, Tapaderas, Tinajas (destaca una que se halla firmada por el alfarero), Candiles, Palmatorias, Pebeteros y Anafres.