A pocos kilómetros del municipio de Yecla, cerca de la carretera que se dirige hacia el pueblo manchego de Fuente Álamo, perdido entre campos de viñedos y próximo a las nuevas urbanizaciones, encontramos un lugar llamado Casa de la Magdalena o de las Monjas y el pozo de la nieve homónimo.
Se puede decir que su estado, después del paso de los años y comparándolo a otros pozos existentes en algunas zonas de la Región, es inmejorable, ya que toda la estructura se mantiene en pie, tan solo el antiguo tejado que protegería su cúpula cónica ha desaparecido, aunque es verdad que incipientes grietas amenazan con dejarlo en poco tiempo en estado de ruina, hecho que varios estudiosos de la Región de Murcia, entre ellos Azorín Cantó, señalaron en su momento.
Este símbolo del pasado disponía de dos puertas de carga, actualmente tapiadas para evitar el peligro que entraña que alguien caiga en su interior. Presenta forma circular, habitual en este tipo de construcciones y está constituido por toda clase de piedras irregulares unidas con argamasa. Toda la estructura cilíndrica está rematada por una cúpula cónica que estaría cubierta por un conjunto de tejas. Actualmente ha desaparecido, pero los restos esparcidos por los alrededores recuerdan que un día resguardó al pozo de las inclemencias climáticas.
Es un hecho reseñable las notorias reparaciones a que ha sido sometido, teniendo como pruebas los distintos yesos y argamasas que se ven aplicados en el pozo.