En una de las salidas del municipio se haya la conocida como Noria de Lorquí. Se encuentra encerrada entre los vestigios de las últimas huertas y la carretera que circunvala el municipio.
A su alrededor se ha acondicionado una pequeña plaza en la que aún perviven retazos de la vegetación que antaño albergaría el entorno de la Noria.
La vieja noria de hierro y madera dejó de funcionar hace más o menos 15 años, cuando regaba campos de tomates, alfalfa, pimientos.., cuando aún no se había explotado el cultivo de árboles frutales.
Es de destacar que el agua que movía era aprovechada por 300 tahúllas, una gran cantidad, por tanto, de las tierras del municipio. Hoy en día, aunque se quisiera, no se podría regar esa cantidad de tierras, debido a la desaparición del antiguo canal de desagüe que se encontraba en el emplazamiento de la actual carretera y que por ello debió de ser desmontado.
Características de la Noria
Está completamente restaurada y sus medidas reflejan las dimensiones más comunes de este tipo de construcciones en nuestra Región. Cuenta con un diámetro de unos 4,5 m, siendo acompañada por 14 pares de radios que conforman su armazón de metal, que se extienden desde su eje hasta la corona.
Los 84 antiguos cangilones como el armazón de metal que forma el eje fueron sustituidos por aleaciones de metal más modernas y que aligeraban el peso de la noria, no obstante su principal ventaja es la posibilidad de un mejor aprovechamiento de la corriente de agua una vez que esté funcionando.
El canal de desagüe está también arreglado y restaurado, se trata de una obra en piedra y ladrillo que en la actualidad aún se utiliza cuando se pone la noria en movimiento, haciendo revivir a los mayores del lugar viejos recuerdos.